No http://desdecuba.com/generaciony/
Hasta el día de hoy, aunque algunas tiendas muestran en exhibición modernos todo-terrenos y climatizados minibuses, ningún cubano puede dirigirse a ellas y comprar –sin más requisito que el dinero– un auto. Hay que recibir antes una carta de autorización, a la que se llega después de años de papeleo. El proceso incluye una exhaustiva supervisión del origen de los fondos y la comprobación de la “limpieza” ideológica del comprador.
Caceta!
E tem, no Brasil, quem goste do socialismo!!!!!!!!!
Acorda Brasil...
Enquanto é tempo!
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